Somos muchos los que empezamos solos, o con un pequeño emprendimiento familiar. Sin embargo, para crecer necesitamos invertir, sumar gente y, sobre todo, contar con un buen asesoramiento. Te acompaño para minimizar riesgos, y a encontrar esa oportunidad para dar el salto.
Por Omar Lares*
Hace 30 años, cuando recién empezaba a trabajar como contador público, tuve como cliente una empresa pequeña, familiar, que se dedicaba a brindar servicios a diferentes tipos de clientes, desde bancos, organizaciones multinacionales hasta organismos privados y estatales. A través de los años, fuimos creciendo juntos y esa empresa llegó a tener más de 70 empleados.
Aprendí que un emprendedor puede transformarse en un gran empresario. Que un cliente unipersonal, como un monotributista, puede alcanzar, con esfuerzo y mucho esmero, posiciones inimaginables.
Hace muchos años, en los inicios de mi actividad profesional independiente, compartía la oficina con una inmobiliaria. Un día, llega una persona para pagar el alquiler de un galpón. Su aspecto era de un hombre de trabajo. Vestía un mameluco mecánico; llevaba puesto unos botines con punta de acero; tenía las manos curtidas, limpias, pero con restos debajo de las uñas; su mirada era tierna, despejada y de buen semblante. Yo había terminado mi jornada de trabajo; me iba para mi casa cuando escuché decir a la recepcionista que, por ese día, ella creía que ya el estudio contable no lo atendería, y le pidió que venga en otro momento. Al escuchar esa frase me frené de golpe; giré; miré a la recepcionista, con vasta experiencia en el trabajo; hice una seña y me acerqué al señor. Entonces descubrí que él no era tan mayor, que podríamos tener la misma edad. Yo conocía el gesto de esa mujer, pero no le había dado importancia. Ella solía juzgar a la gente por su aspecto.
Al preguntarle a ese joven qué le sucedía, él me explicó todo el inconveniente y comentó que nadie le daba demasiada importancia; que ya había recorrido varios estudios contables sin que lo atiendan. Luego de escucharlo, y de notar que estaba algo angustiado, le dije que me viniese a ver al otro día.
El señor era un chatarrero unipersonal. No solamente le solucioné el problema, sino que, con el tiempo, pudo constituir una sociedad anónima, tomar varios empleados, y dejar de alquilar. Incluso compró su propio espacio para instalar la chatarrería; adquirió camiones, palas mecánicas y una balanza pública. Hoy, es un empresario exitoso; sigue siendo un emprendedor en otros proyectos y hace inversiones nacionales y extranjeras.
Por eso, en Estudio Omar Lares, además de trabajar con empresas constructoras, atiendo a pymes y a emprendedores monotributistas que recién empiezan. Nunca podrás saber qué potencial hay detrás de cada persona hasta que no te abrís a ellas. Esa es una consigna de la que, nunca, hay que renunciar.
Para que puedas dar el salto de emprendedor a empresario, tengo varios recursos:
• Te asesoro sobre los temas administrativos y fiscales (contabilidad e impuestos), según tu condición.
• Analizo tus inversiones, te doy un diagnóstico de posibles rentabilidades y desvíos.
• Ordeno tus recursos humanos, para que puedas ir armando un equipo de colaboradores.
Por más que hoy recién estés empezando, vas a poder acceder a mis servicios en Estudio Omar Lares, porque siempre intentamos acomodarnos a diferentes situaciones.
La inversión permite el crecimiento. Si uno quiere crecer, hay que invertir bien. Desde el Estudio Omar Lares, voy a estar para acompañarte en ese crecimiento. Hoy, tengo grandes clientes de hace más de 25 años, que empezaron con uno o dos empleados.
Te aconsejo que vayas detrás de tu deseo. Nunca hay que estar con la visera baja, siempre hay que mirar el bosque. A veces, las oportunidades están a la vuelta de la esquina.
* Omar Lares
Contador Público por la Universidad Nacional de Lomas de Zamora
Especialista en Sindicatura Concursal por la Universidad Notarial Argentina
Master en Insolvencia Empresaria en la Universidad de Morón
Master en Dirección de Empresas Constructoras e Inmobiliarias (MDI) en la Universidad Politécnica de Madrid
Escribime a estudioomarlares@gmail.com y me pondré en contacto con vos a la brevedad.